Bird_p137 reviewed Les Trois Mousquetaires by Alexandre Dumas
Espadas, Lealtad y el Eco de una Amistad Inquebrantable
5 stars
Los tres mosqueteros, y volver a esta novela de Alejandro Dumas fue, para mí, reencontrarme con una energía narrativa que no envejece. Desde las primeras páginas, cuando el joven d’Artagnan llega a París con más orgullo que experiencia, sentí el impulso del movimiento constante, de la aventura que no da tregua. La historia sigue su ingreso al mundo de los mosqueteros del rey y su vínculo con Athos, Porthos y Aramis, una amistad que se construye entre duelos, peligros y una lealtad casi absoluta.
Mientras leía, me sorprendió lo viva que sigue siendo la trama. Intrigas políticas, conspiraciones en la corte y enfrentamientos con los guardias del cardenal Richelieu se encadenan con un ritmo que me mantuvo atento y curioso. Me dejé llevar por ese espíritu de “todos para uno y uno para todos”, una frase que, aunque conocida, recuperó fuerza al verla encarnada en acciones concretas y sacrificios …
Los tres mosqueteros, y volver a esta novela de Alejandro Dumas fue, para mí, reencontrarme con una energía narrativa que no envejece. Desde las primeras páginas, cuando el joven d’Artagnan llega a París con más orgullo que experiencia, sentí el impulso del movimiento constante, de la aventura que no da tregua. La historia sigue su ingreso al mundo de los mosqueteros del rey y su vínculo con Athos, Porthos y Aramis, una amistad que se construye entre duelos, peligros y una lealtad casi absoluta.
Mientras leía, me sorprendió lo viva que sigue siendo la trama. Intrigas políticas, conspiraciones en la corte y enfrentamientos con los guardias del cardenal Richelieu se encadenan con un ritmo que me mantuvo atento y curioso. Me dejé llevar por ese espíritu de “todos para uno y uno para todos”, una frase que, aunque conocida, recuperó fuerza al verla encarnada en acciones concretas y sacrificios reales.
Cada mosquetero me despertó una emoción distinta. Athos, con su melancolía silenciosa, me produjo respeto y una tristeza contenida. Porthos aportó ligereza y humor, mientras que Aramis, dividido entre la espada y la vocación religiosa, me hizo pensar en las identidades múltiples que uno intenta conciliar. D’Artagnan, impulsivo y ambicioso, fue el espejo de la juventud que se lanza al mundo sin medir del todo las consecuencias.
La figura de Milady me generó una inquietud persistente. Su inteligencia y crueldad añadieron una tensión oscura que equilibró el tono aventurero con una sensación de peligro real.
Al cerrar Los tres mosqueteros, sentí una mezcla de entusiasmo y nostalgia. Más allá de la aventura, la novela me recordó el valor de la amistad, del honor y del compromiso compartido. Fue una lectura que me devolvió el placer puro de la narración y la certeza de que algunas historias siguen acompañándonos porque hablan de ideales que no pasan de moda.
